miércoles, 20 de mayo de 2009

El Sur. Victor Erice.

TITULO El sur
AÑO 1983
DIRECTOR Víctor Erice
GUIÓN Víctor Erice (Relato: Adelaida García Morales)
REPARTO Omero Antonutti, Sonsoles Aranguren, Icíar Bollaín, Lola Cardona, Rafaela Aparicio, Germaine Montero, Aurora Clement, María Caro, Francisco Merino, José Vivo
PRODUCTORA Coproducción España-Francia; Elías Querejeta P.C. / Chloe Productions

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Dice el mismo Erice que es una película incompleta, que los problemas de la producción, no le dejaron terminar el viaje de ida y vuelta al Sur.

El Sur se plantea como la historia de Estrella que, con sus recuerdos, va relatando la relación que le unía a su padre; una relación de admiración, misterio y distanciamiento. Con identidad propia, Victor Erice logra una película con muy buena recepción de público y crítica. La breve pero intensa trayectoria profesional del cineasta hizo que El Sur se encaminase a la cumbre del Nuevo cine Español y que a él le situara entre los directores de cine reputados y consagrados como Mario Camus, Saura o Trueba. Su generación había irrumpido con fuerza como una generación joven, con estudios universitarios; una generación que no había vivido la guerra ni sus consecuencias pero que buscaba desempolvar viejos recuerdos de vencidos que fueron ocultados y recortados bajo las tijeras de la censura. Jugando con ingenio, y hasta que la censura no dejó de ser vigente, esta generación supo decir, no con palabras, aquellas ideas reivindicativas que querían plasmar. Por citar algunas de las obras que se estrenaron entre los 60 y 80, podemos destacar El espíritu de la Colmena (con la que Erice irrumpió en el cine), la Prima Angelica de Saura y Ana y los lobos, o un poco más explícito, El crimen de Cuenca de Pilar Miró. Aunque El sur no termina de ser representativo de ese cine con connotaciones políticas, Erice sigue posicionándose y hace una pequeña referencia política, entre otras razones, para contextualizar la historia de Estrella y su padre Agustín.

Hablando de política: la situación de cambios, de desestabilidades y de incipiente democracia que se mascaba a principios de los 80, hicieron que se produjera un cambio en el ente televisivo Público y que se nombrase a Jose María Calviño como Director General de RTVE. Las consecuencias más inmediatas de este cambio, fueron la negación de una subvención con la que esperaba Querejeta rodar la película en el Sur. Si el plan de rodaje estaba fijado en 81 días, se paralizó a 33 días de su finalización. Esto hizo que la película quedase inacabada y, aunque se habló de una segunda parte, el director aseguró que nunca se había planteado la película para dos episodios y que el proyecto de finalizar la película quedó cerrado en el momento en que el productor, tras el éxito de taquilla, desistió.

La belleza, el barroquismo visual, el ritmo fílmico generado con el montaje, y la belleza visual de la que hace gala Erice, tiñen a la película de un embrujo y un misterio que la hacen única. La película estaba planteada para seguir una estructura argumental completamente paralela en la que el padre figuraría como el nexo de unión entre el Norte y el Sur; y su muerte sería el punto de inflexión. Es por ello que pueda parecer descompensada la historia filmada al extenderse en la infancia y reducir a pocos minutos la juventud de la muchacha.

La película comienza con una escena en la que priman los tonos oscuros de la noche y un ladrido sórdido de un perro. Aquella joven se despierta y es consciente de que su padre ya no va a volver. Un péndulo que encuentra debajo de su almohada le hace retornar al momento en el que más unida estuvo a su padre.

El padre se presenta como un hombre misterioso, un médico que es capaz de encontrar agua subterránea con el movimiento del péndulo. El primer recuerdo que tiene Estrella de su padre es cuando él adivinó que iba a ser chica; un recuerdo que ella crea en su mente fruto de la admiración profunda que siente hacia su progenitor. Aquel hombre, tras su fachada de hombre bonachón y simpático, introvertido y timido, esconde tras de sí una historia de amor vivido en el Sur con una joven actriz que se hace llamar Irene Ríos.

Los planos perfectamente cuidados, recrean percepciones visuales que recuerdan a técnicas pictóricas del impresionismo. Además, juega mucho con los trazos rectos que se dibujan con los caminos. Otro de los aspectos estéticos a destacar podría ser el juego de luces que se alternan entre un plano y otro utilizando las técnicas del claro-oscuro, no sólo en el interior de los planos, si no también en el propio montaje. Tanto es así que podemos resaltar secuencias representativas como la de la Primera Comunión como uno de los momentos en el que además, se percibe la esencia más profunda de la película por varios motivos:

El primero es que sabemos que el padre no es creyente, y que fruto de su ideología no atiende a cuestiones de fe. En un segundo momento podemos ver el nexo de unión que vincula a padre y a hija, no solo cuando el padre sale de las sombras para abrazar a su hija (de las sombras como misterio), si no también en el pasodoble que bailan en el banquete, (que será referencia en la última comida que mantengan padre e hija). Además de ello, en la primera comunión están presentes su abuela y Milagros, que vienen del Sur y que serán su nexo de referencia y de unión con Andalucía.

-------De esa secuencia, y a modo anecdótico, podemos resaltar como resolvió el plano del banquete Victor Erice con un plano secuencia perfectamente trazado. Al parecer, el banquete estaba planteado en un exterior, pero las condiciones meteorológicas propias de Enero y propias de Logroño, hicieron que la lluvia fuese un problema para la grabación y que se tuviese que rodar en un interior. No obstante, pese a ser improvisado, es uno de los planos secuencia más reseñados por críticos e historiadores de cine.------

La primera Comunión también es un punto de inflexión en la película. Poco a poco se empieza a desvelar el misterio del Padre, ella encuentra pruebas de que su padre esconde un secreto con una mujer llamada Irene Ríos. Estrella descubre que es una actriz no muy conocida y de poca fortuna, pero desconoce el resto. Lo único que se relata en la película es que el padre recuerda a una mujer a la que conoció hace muchos años y que vive en Sevilla, y que tuvo un mal presentimiento sobre su muerte y que por ello, ocho años después de algo que la abandosa, se pone en contacto de nuevo con ella. Ella, por supuesto, no le corresponde por algo que hizo y que parece ser un recuerdo muy doloroso. A partir de ese momento, la relación de Estrella y su padre cambia hacia un profundo distanciamiento. Aquella misma noche, su padre no regresaría a casa; esa sería la primera de muchas veces que no volviese, seña de su profundo desencanto con la vida que ha creado.

Hasta entonces, las únicas referencias que habíamos tenido sobre el pasado del padre eran las citadas por la madre y por Milagros. También ese es el único momento que se menciona la política en la película. La madre era una maestra represaliada por el régimen Franquista y el padre, supuestamente, se fue de motu propio (o no) por las diferencias políticas que existían con su padre. Agustín llegó incluso a estar preso por su condición de republicano, pero no se cita nada más. Siguen siendo aspectos se esbozan en la película y que es a lo que se refiere Erice con que sigue siendo una película incompleta, pero que en ese aura de desconocimiento y de finales abiertos reside la maestría de la película.

Otro de los momentos de la película mejor trazados es cuando se produce el cambio temporal de niña a mujer. Vemos como se aleja en el camino trazado con una bicicleta y regresa en el mismo camino pero años después (aunque sabemos que se trata de una acción cotidiana).

La nueva situación en la que nos encontramos es en la de una niña que se ha hecho mujer, con un cierto carácter introvertido, una madre que se encuentra enferma y un padre que apenas reside en el hogar. La figura de Irene Ríos se ha desvanecido pero ha dejado una profunda huella en Estrella; tanto es así que le preguntará a su padre sobre esa identidad misteriosa mientras comen juntos. Lo que podemos ver reflejado en esa escena es la debilidad y la pleitesía de un padre que parece estar en deuda con su hija. Una comida en la que reside un adiós, pues horas más tarde su padre se quitaría la vida. Ella misma, tras conocer la noticia, siente que tal vez pudo haber hecho algo más aquel día por él, donde le dejó sólo, tomando una copa y escuchando aquel pasodoble que bailaron juntos en el mejor de sus momentos.

Poco después ella emprende un camino hacia el Sur, donde aquellas postales que evocan una Sevilla profunda del siglo XIX dejaran de ser una imagen mental para convertirse en un recuerdo. Erice así cierra una película que queda con un final abierto; y me apresuro al decir que probablemente sea mejor así, pues tal vez el cierre de la película no hubiera sido tan brillante como el filme en sí es.

Lo que se quedó en el tintero


La película, en su totalidad, estaba planteada en una estructura paralela, en un viaje de ida y vuelta al Sur; en dos paralelismos de Norte y Sur. Según declaraciones de Erice: “se quiebra la dimensión moral del Relato. Estrella viajando al Sur, cumplía el viaje que su padre nunca pudo hacer. Cumplía de ese modo el mandato paterno”; y es que el péndulo que ella encuentra debajo de su almohada simbolizaba la unión que existía entre ambos. Con el viaje al Sur ella conocía el pasado de su padre y se reconocía a ella misma.

En el Sur lo que existía era una historia paralela, la de la actriz, Irene Ríos, que había mantenido una relación con su padre y fruto de aquello, había tenido un hijo. Estrella conocería a su hermano, que no la reconocería como tal. Además, en esa segunda parte, también aparecería Fernando Fernán Gómez, que encarnaría a un cobarde de guerra, hermano de Irene y encargado de la educación del niño.

Estrella se reconciliaría con su pasado y su padre al lograr enseñarle a su hermano el péndulo con el que su padre buscaba agua en el campo. Un final, que nunca vió la luz y que siempre quedó en la mente del director.


A continuación, para quien le interese, pueden ver la entrevista que Victor Erice concedió hablando sobre el filme.